jueves, 9 de abril de 2020

VENEZUELA, EJEMPLO DE CONTENCIÓN DEL COVID-19


Ciertamente, nuestro país ha sido uno de los pocos con una respuesta efectiva de confinamiento localizado, posteriormente nacional, al confirmar el primer caso por Covid-19. Esto nos coloca en el mismo rango de otros países de América que tomaron la misma medida en tiempos similares, como El Salvador y Haití.

A partir de allí, se han establecido diversas medidas oportunas para evitar la proliferación del virus, y se ha recibido ayuda de China y Rusia con insumos para fortalecer la atención que hasta ahora lleva Venezuela sobre el caso.

Esta actuación del gobierno venezolano le ha ganado un importante reconocimiento internacional por su lucha para prevenir los contagios en la población venezolana, frente a esta nueva pandemia que azota el mundo.

Por su parte, las potencias mundiales, en su mayoría con economías capitalistas, optaron por un tiempo de respuesta mucho más lento, incluso casi de incredulidad, ante esta amenaza, ya que evidentemente esto afecta sus niveles de rentabilidad y disminuye fuertemente la ganancia de sus empresas. Además, es claro que no les importa una reducción de la población y menos si representa un porcentaje “pequeño” para efecto de sus estadísticas, demostrando una vez más lo inhumano de este modo de producción. Incluso, una vez tomando medidas sobre la pandemia, los primeros afectados son los trabajadores, con despidos masivos, ya que no pueden garantizar sus salarios mientras existan medidas de cuarentena; esto hizo que sólo en la última semana la solicitud del seguro por desempleo en EEUU aumentara en más de 6 millones de personas.

Sin embargo, ya a finales del año pasado se observaba a nivel mundial una posible recesión económica, sin presencia del Covid-19, el cual, en tal caso, lo que está haciendo es acelerar dicho proceso. Por ello es importante preguntarse ¿todas las políticas que afectan directamente a los trabajadores son producto del virus? Eso no lo creo. Se está aprovechando esta situación para garantizar un mayor control sobre políticas de ajuste que sirvan a las corporaciones para afrontar la crisis.

Ahora bien, en el caso particular de Venezuela ¿cómo en medio de una profunda crisis logra esta atención inmediata? Lo primero es que nuestra economía prácticamente ya se encuentra paralizada; y aquí algunos dirán que hay experiencias productivas que están funcionando, pues esas experiencias no representan la realidad total de nuestra actividad a nivel nacional. En Venezuela, durante los últimos años, ha crecido exponencialmente la actividad informal, principalmente porque con los salarios –del sector público o privado– los trabajadores no pueden garantizar la subsistencia propia ni de sus familias.

Lo otro que se puede comentar es el aumento desmedido de las fuerzas represivas del Estado en la calle. Con el argumento de que vivimos una “guerra no convencional” y el asedio constante a los altos dirigentes del gobierno, estas fuerzas se mantienen realizando “ejercicios” constantes para prevenir posibles “ataques”. Por lo que la aplicación de un mecanismo de contención, que incluya a estas fuerzas, no es algo extraño incluso para la población.

También es importante señalar que nuestro país no tiene un significativo nivel de conectividad con el resto del mundo, eso se puede ver en la disminución de las importaciones y de los vuelos diarios al exterior desde hace varios años. Siendo el Covid-19 un virus que se contagia principalmente con el contacto directo, en un país con pocos vuelos y accesos a otras partes, es fácil atender esta realidad de forma inmediata y focalizada. Condiciones que permiten un nivel de infección mucho menor al resto del planeta.

Me parece importante recordar estas cosas, ya que en poco tiempo se ha olvidado la realidad previa al virus, que ya era bastante preocupante.

Ahora, con este nuevo escenario, es necesario preguntarse ¿quién se ve beneficiado hoy? Y otra igual de importante ¿Son solamente medidas para controlar el virus o también sirven para contener a la población frente a la realidad económica del país?; Además ¿la única solución es quedarse en casa? y ¿qué pasa con las personas que no gozan de servicios adecuados y que viven del día a día?, porque hay quienes ni siquiera cuentan con elementos básicos para evitar el contagio, como lo es un jabón para lavarse las manos.

Es cierto, Venezuela es ejemplo en atención inmediata ante la propagación de la pandemia, pero el virus pasará y sus consecuencias no serán precisamente sólo la lamentable pérdida de vidas.

Francisco Daza

No hay comentarios:

Publicar un comentario

El barrio en tu radio!!!